Abella tenía muy malas calificaciones y su papá para estimularla le aseguró que si estudiaba le regalaría lo que ella pidiera. Así que mejoró sus calificaciones y pidió le cumplieran la promesa, fue así como esta chica usó una maquina sexual y ahora su padre la supervisa cuando la utiliza por primera vez.
Comenzó instalándola e intentando saber cómo se sentiría ponerla en su vagina, la sensación que experimentó a través de su pantalón hizo que en un instante se desnudará para dejar que su juguete nuevo se la folle en todas las posiciones mientras con otro de sus accesorios estimula su clítoris y su padre graba la cara de zorra que pone a medida que es penetrada una y otra vez.
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