No te pierda a esta treintañera solitaria mientras se masturba con un par de consoladores: uno para cada hueco. Esposa cansada y madre, Amanda no tiene sexo con su marido desde hace años. En su lugar se exhibe frente a miles de personas cámara web y se folla a quien se encuentre en su camino.
Con un vibrador en el chocho y la webcam entre sus piernas, se va introduciendo un consolador al culo. Una vez con el pene de plástico completamente dentro de su ano, comienza a frotarse el clítoris con sus dedos violentamente a la par que gime. Mientras se frota el clítoris y el vibrador en su vagina hace su trabajo, Amanda se balancea lo que produce que el consolador en su culazo entre y salga lentamente.
La triple estimulación comienza a hacer efecto: del coño empieza a salir un líquido blanco que se esparce por toda la zona. Los gemidos rápidamente se transforman en gritos, sus piernas tiemblan y cada vez hay más liquido blanco saliendo. Se detiene, sonríe a sus usuarios y aprovecha para responder a algunos mensajes.
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